La Visión del Presidente: El Momento para Salvar a la Vida Silvestre es Ahora

Las plantas y los animales de la Tierra se encuentran en riesgo, el cual incrementa a un ritmo sin precedentes.

Collin O’Mara, Presidente y Director Ejecutivo de la National Wildlife Federation
Conservacion
Aug 01, 2019

Durante una visita a la Bahía de Delaware, Collin O'Mara muestra a su hija, Alana, un cangrejo herradura, cuyos huevos son una vital fuente de alimento para la especie migratoria del playero rojo (también conocido como correlimos gordo). Ambas especies están en riesgo.

NECESITO TU AYUDA. A pesar de los éxitos que ha cosechado nuestra nación en el campo de la conservación, como lo son la restauración de las poblaciones de águilas calvas, caimanes americanos, pelícanos marrones, borregos cimarrones, pavos salvajes y más, un nuevo y sorprendente informe de la Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos concluyó que más de 1 millón de las especies de plantas y animales en la Tierra están en riesgo de extinguirse en las próximas décadas, a un ritmo sin precedentes en la historia humana.

El informe, compilado por aproximadamente 150 expertos que revisaron más de 15,000 artículos científicos, citó múltiples factores como causa de la disminución de especies, incluida la pérdida y fragmentación del hábitat, el consumo excesivo, las especies invasoras, las enfermedades y el cambio climático. El reporte concluyó que "estamos erosionando los cimientos de nuestras economías, medios de subsistencia, seguridad alimentaria, salud y calidad de vida a nivel mundial".

Dadas las graves implicaciones presentadas por este informe, uno podría haber esperado noticias de primera plana. Sin embargo, más del 60 por ciento de los principales periódicos de Estados Unidos no cubrieron estos hallazgos en sus ediciones impresas. Es aquí donde se encuentra nuestro principal desafío: necesitamos convencer a todos los estadounidenses de la importancia de actuar para revertir la crisis de la vida silvestre. La extinción en masa tendría un efecto catastrófico sobre el 75 por ciento de nuestros cultivos alimentarios, los cuales dependen de una sana población de polinizadores. De igual manera, la salud pública sufriría a medida que las enfermedades y los parásitos, que actualmente se controlan gracias a la existencia de ecosistemas sanos, comiencen a salirse de control. Finalmente, sería un fracaso moral permitir que estas especies se extingan bajo nuestra vigilancia.

Este problema es tanto local, como lo es global. Los científicos de la National Wildlife Federation estiman que más de un tercio de todas las especies de Estados Unidos se encuentran en mayor peligro de extinción, incluidas las ranas, las tortugas, los murciélagos, los pájaros cantores, las abejas y las mariposas. Para hacerle frente a esta crisis, junto a nuestros afiliados estatales, estamos liderando la misión para salvar a la vida silvestre. Con el motivo de lograr este cometido, actualmente trabajamos con el Congreso para aprobar la bipartidista Ley de Recuperación de la Vida Silvestre de Estados Unidos, la cual destinaría una cantidad significativa de recursos para la conservación proactiva y colaborativa de más de 12,000 especies que los estados han identificado como prioridades de acción. También nos esforzamos por restaurar las tierras públicas y de trabajo de Estados Unidos, por proteger los miles de kilómetros de corrientes de agua dulce y grandes cuerpos de agua y por convertir a las ciudades de Estados Unidos en sitios más amigables con la vida silvestre. De igual manera, seguimos conectando a más de 10 millones de niños con la naturaleza cada año.

Estoy completamente seguro de que trabajando juntos, podremos enfrentarnos al desafío de salvar a la vida silvestre de los Estados Unidos, pero necesitamos tu ayuda para difundir nuestro mensaje y crear hábitats de vida silvestre en jardines y patios traseros, abogar por políticas de conservación y fomentar la recreación al aire libre para nuestros niños. La extinción es para siempre, por lo que no tenemos más remedio que triunfar.

Traducción: Jessica Ordóñez-Lancet